30 enero, 2007
Cuando Pepe y Rosita llegaron a Venezuela (1931)
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Queridos familiares, Les entrego este valioso legado. Dos vidas que nos atañe en lo personal y también a nuestro país, pues José y Rosa dieron generosamente lo mejor de sí para contribuir a su progreso. De esta forma breve, deseo plasmar un testimonio vivencial-histórico que considero valedero para el afianzamiento de nuestras raíces, en las generaciones presentes y futuras. Dedico esta página con amor a mis progenitores.
4 comentarios:
Hola abu, soy tu nieta, que acaba de ver el blog y la verdad es que está genial, perfectamente decorado, las fotos impresionantes y los textos me los estoy leyendo ^^
Genial trabajo y espero que visites el mío! ;)
Hermoso testimonio de amor familiar y por la patria. Lo había leído y me conmueve el homenaje que ofreces a tus familiares.
Un beso desde Chile
Jaime
America vi el gran trabajo que hiciste...Que hermoso es pensar y escribir para ellos que dejaron ese legado tan interesante, seres que dieron todo por alcanzar ese sueño...La senda que dejaron esos pasos son dificiles de igualar...Ojala cuando nos toque a nosotros alguien nos escriba un trozo de algunas palabras calidas y diremos desde donde estemos...
HEMOS CUMPLIDO....
Hector
America, de tal palo tal astilla; llevas tanto los genes como la inpiracion y talento de tus padres; si, todo concentrado en ti. Vi el Blog completo, aunque tengo que volver para detallarlo; me detuve a releer varias cosas y detallar las fotos.
Cuanto se perdio cuando fallecio tu madre en el 68 - que tragedia! Como sucedio ese accidente? Toda una personalidad! Que trayectoria la de tu papa! Cuantas vivencias y legado escrito y documentado para la posteridad! Ambos emigrantes que se enamoraron de Venezuela, la quisieron y la hicieron suya, para trabajar por ella y para ella! Que orgullo de padres America! Me quito el sombrero, aunque no uso! Ya vere mas de tus blogs y luego te sigo comentando. Cuantas cosas interesantes y amenas!
Me alegra mucho haberte conocido, aunque sea por el Dios internet!
Xabier
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