30 enero, 2007

José Ratto-Ciarlo


Giuseppe Stefano Antonio Ratto-Ciarlo nació en la ciudad de Lima (Perú) el 18 de noviembre de 1904. Hijo de genoveses -provenientes de la provincia de Savona- Nicola Ratto Ratto y Anna Ciarlo Parodi. Nicolás Ratto emigró al Perú en 1898 allí se estableció como comerciante y empresario. La profesora Ana Ciarlo dejó en 1902 la dirección de una escuela en Génova para ejercer la misma profesión en Lima, en la escuela Humberto I -donde se impartía clases en italiano y español- oficialmente admitida por el Ministerio peruano de Instrucción. Este establecimiento aún subsiste.

José hizo sus primeros estudios en Lima, luego en Génova (de 1914 a 1923) realizó estudios superiores en Humanidades, que comprendía: Latín, Griego, Literatura universal, y Arte. Durante esta estadía en Génova realizó sus primeros contactos con el periodismo en la imprenta Tipografía operaria de Corsi e Ciarlo, de su abuelo materno Stefano Ciarlo, quien para ese entonces publicaba el diario Il Vero.
En 1928 regresa a Lima para revalidar sus estudios e inscribirse en la Universidad de San Marcos. Militó en la Confederación del Trabajo del Perú donde compartió con el sociólogo y pensador de vanguardia Juan Carlos Mariátegui, colaborando en su revista Amauta. Como anécdota podemos señalar que Mariátegui hablaba muy buen italiano ya que había estudiado en Italia, así que ambos amigos pudieron intercambiar mucha información en esa lengua. Para esta época, dirigió el periódico semanal Vanguardia y tanto él como un grupo de universitarios fueron encarcelados por el dictador Sánchez Cerro en 1931, en vez de ser enviado a la Isla de San Lorenzo en calidad de preso fue deportado del país. Es así como en 1931 con 27 años de edad llega al puerto de La Guaira y hace venir desde Lima a Rosa Vergara para contraer matrimonio.

En el año de 1936 el matrimonio suscribe la carta de Manifestación de voluntad de ser Venezolano y se nacionalizan tal y como consta en la gaceta oficial no. 18.909 del 19 de marzo de 1936. Durante estos años se radican en Maracaibo. Allí Ratto-Ciarlo trabaja de profesor de Latín y raíces Griegas en el Liceo Sucre y edita con un grupos de intelectuales del Zulia, la revista Espesor.

A la muerte de Gómez el matrimonio se traslada a Caracas. En esta ciudad comienza a trabajar en El Demócrata en funciones administrativas. Para el año de 1937 se desempeña como Secretario de Cultura de la recién fundada Asociación Nacional de Empleados (ANDE)Trabajó en la redacción del periódico Crítica -dirigido por Eloy Chalbaud Cardona- donde se desempeñó como cajero. Luego cuando el periódico se transformo en El Tiempo, durante el período de gobierno de Medina Angarita (1941 -1945) bajo las sucesivas direcciones de M.F. Rugeles, Mariano Picón Salas y luego Ramón Díaz Sánchez, se desempeñó como redactor político y sindical. Funda junto a José Pirrone -también italiano nacionalizado venezolano- la organización antifascista Italia Libre de la cual es su primer Secretario general.

Al momento de fundarse el Partido Democrático Venezolano (PDV) el Dr. Uslar Pietri lo encarga de la administración del semanario En Marcha, órgano oficial de ese partido. Cuando cae el gobierno de Medina (1945) los primeros en ir presos son Ramón Díaz Sánchez, Alirio Ugarte Pelayo y José Ratto-Ciarlo, quienes van a dar a la Cárcel Modelo por trabajar en el diario oficialista. Después de unos meses de presidio lo confinan a la ciudad de Valera donde ya se habían establecidos sus padres, venidos del Perú siguiendo al único hijo. Desde los Andes, escribe y envía sus reportajes a Antonio Arráiz -para el momento director de El Nacional- bajo los seudónimos de Peregrino Pérez y/o Tito Rojas Lacero.

Ratto-Ciarlo egresó como Periodista titular por la U.C.V. en la primera promoción de periodistas que se graduó en el país "Promoción Leoncio Martínez" en el año 1950. De 1947 a 1967 formó parte de la planta de periodistas de El Nacional. Allí publicó su columna Arabescos de crítica cultural. De este periódico se retiró desempeñando el cargo de Jefe de la Página de Arte.

Hasta esta época en Venezuela no se estilaba la edición formal de una página de este tipo en la prensa venezolana. Gracias a las dirección de hombres de la talla de Reyes Baena, Uslar Pietri y Otero Silva se da cabida en las páginas de El Nacional a esta modalidad, por lo que podemos considerar a Ratto-Ciarlo como un pionero en este género y formador de profesionales en el área. Con el devenir de los años, estas páginas culturales se transformaron en los suplementos culturales que actualmente leemos todos los domingos en nuestros diarios.

Durante su paso por el diario Ultimas Noticias de 1968 a 1974 funda el Suplemento Cultural donde se dió cabida a la contribución de innumerables escritores, literatos y poetas venezolanos. Ejerciendo esa labor fue encarcelado por la publicación de un capítulo censurado de las memorias del novelista Argenis Rodríguez. En 1976 escribe una columna fija en El Mundo titulada: Un rato de charla con Ratto-Ciarlo, siempre bajo el mismo tenor cultural.

Paralelamente a su labor profesional, José Ratto-Ciarlo efectuó trabajo sindical y gremialista dentro de su profesión. En 1948 luego de restablecida la legalidad -durante la Junta Revolucionaria de Gobierno- se inscribe junto a su esposa en Unión Republicana Democrática (URD) partido liderizado por Jóvito Villalba.

Luego de varios años de militancia se retira de la actividad política para dedicarse de lleno a su profesión. Por sus actividades gremialistas, ocupó la Secretaría de la Asociación Venezolana de Periodistas (D.F), hoy Colegio Nacional de Periodistas. Miembro fundador de la Asociación Venezolana de Escritores; fundador de la Asociación Venezolana de Conciertos, con Rahzes Hernández López e Israel Peña. Conjuntamente con el crítico francés Ami Courvoisier, funda el Círculo de Cronistas Cinematográficos de Caracas. Así se da comienzo a los cines clubes y los festivales cinematográficos en nuestra ciudad capital. También ejerció labores en la Dirección de Información y Relaciones Públicas del CONAC.

José Ratto-Ciarlo ha publicado numeroso libros sobre periodismo, historia y arte. Entre ellos cabe destacar: César: contribución al estudio de una dictadura(1941) La utopía del reino de Dios (1955) Historia caraqueña del periodismo Venezolano (1967) y La libertad de prensa en Venezuela (1972) que son utilizados como textos de referencia en las escuelas de periodismo. Su obra tiene numerosos premios y reconocimientos, tales como El Correo del Orinoco, expresión periodística de ecumenismo Bolivariano (1968) que fue premiado con mención de honor en el concurso Sesquicentenario del Correo del Orinoco. Publicó también un hermoso trabajo sobre el pintor Carlos Otero (1978); Los Inmortales, en 2 vols. (1973); Ayacucho, coronamiento de la revolución bolivariana (1974) que se editó en conmemoración del sesquicentenario de esa batalla. Sus obras están depositadas y se pueden consutar, en la Biblioteca Nacional de Venezuela (Caracas) y en la Library of Congreso (Washington, D.C.)

Además ha sido reconocido con varias condecoraciones, entre ellas: Cavaliere de la República Italiana, de la República Española, Medalla de la Sociedad Bolivariana de Venezuela, la Orden Andrés Bello y Premio Nacional de periodismo 1979-80 en reconocimiento a su labor cultural.

En su desempeño como reportero escribió una serie de reportajes entre ellos: De Caracas a Roma y otros sobre ciudades Norteamericanas, producto de una gira que hizo por los EE.UU. atendiendo a una invitación del Departamento de Estado, en 1960.

Al momento de su fallecimiento en 1997 -a la edad de 93 años- trabajaba en la revisión de algunos escritos históricos, conjuntamente con el historiador Federico Brito Figueroa.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Pachi, gracias a tu mamá, ayer en la tarde tuve una de las mejores
conversaciones que he tenido ultimamente con mi papá. Revise el blog de ella que me enviaste.
Esta super bueno, con un montón de información importante para el
periodísmo venezolano....Resulta que mi papá escribió en el Nacional
crónicas de ajedrez en la epoca en que tu abuelo era periodísta de planta del Nacional.
Por supuesto que mi papá se acuerda de su nombre, pero no lo
conoció....
Resulta que mi papá en esa epoca (a partir de 1955) organizaba los
torneos interperiodistas e interdiarios a través de la federación venezolana de ajedrez, del cual era miembro......
me tengo que ir a trabajar que fastidio....te sigo el cuento luego, pues está de lo mas bueno.
El caso es que gracias al blog de tu madre pueden surgir, ideas,
usarlo como referencia histórica, punto de referencia y orgullo para
la familia....hasta generar conversaciones lindas como la que tuve ayer con mi padre.
Que tengas un muy buen día!!!!

Mecha